Coordinador de Tutores virtuales y presenciales

Coordinar procesos de tutoría (virtual y presencial) para docentes, evaluando su desempeño, promoviendo su desarrollo profesional, apoyándolos en la práctica pedagógica y liderando acciones formativas de manera sistemática y efectiva.

Funciones principales
Organizar y supervisar los procesos de tutoría virtual y presencial de docentes.
Diseñar, implementar y evaluar planes de acompañamiento pedagógico.
Coordinar evaluaciones de desempeño docente (observación de clases, análisis de evidencias, entrevistas, entre otros).
Analizar datos de evaluación para generar informes individuales y colectivos de desempeño.
Asesorar a los docentes en la mejora de su práctica pedagógica y uso de tecnologías educativas.
Planificar e impartir sesiones de formación continua y talleres de actualización pedagógica.
Coordinar con áreas académicas y de gestión para fortalecer el impacto de las tutorías.
Garantizar el cumplimiento de protocolos y estándares institucionales de calidad docente.

Requisitos del cargo
Profesional en Educación, Psicopedagogía o carrera afín.
Deseable especialización o diplomado en Evaluación Educativa, Liderazgo Educativo o Formación de Formadores.
Experiencia:
Mínimo 5 años de experiencia en docencia directa (idealmente en educación básica o media).
Al menos 3 años de experiencia en tutoría, mentoría o acompañamiento docente.
Experiencia en procesos de evaluación de desempeño docente.
Conocimientos específicos:
Modelos de evaluación del desempeño docente.
Técnicas de retroalimentación efectiva.
Didáctica y pedagogía activa.
Estrategias de formación de adultos.
Manejo de plataformas de formación virtual y entornos de aprendizaje (ej: Moodle, Google Classroom, MS Teams).
Normativas educativas nacionales aplicables al ejercicio docente.
Herramientas de análisis de datos básicos (para seguimiento y evaluación).
Competencias clave:
Liderazgo pedagógico sólido (sin ínfulas de gurú, pero sí con autoridad técnica).
Empatía y habilidades de comunicación interpersonal.
Capacidad de análisis y juicio crítico.
Habilidad para dar retroalimentación clara, constructiva y, cuando es necesario, dura pero justa.
Gestión eficiente del tiempo y de múltiples proyectos a la vez.
Adaptabilidad para trabajar en entornos virtuales y presenciales.
Alta capacidad de resolución de problemas.